lunes, 17 de mayo de 2021

VISITADORES DEL “MY-HA-MY”

Aquí vemos brindando por el cumpleaños del pintor onírico José Martínez Barrios a, de izquierda a derecha, el actor de teatro Gustavo Basanta, al periodista Américo Fernández, abogado Alberto Rojas, esposa del chinito Gong Fung, el pintor Martínez Barrios y el poeta Manuel Ramírez Barazarte.en el Restaurant MyHaMy, entre el bulevar Bolívar y la Calle Libertad, hoy en ruinas, pero que durante años fue muy visitado y se distinguía por la variedad de la tertulia y los personajes, la mayoría artistas, periodistas, abogados y bohemios, Durante los primeros tiempos el lugar fue regentado por el popular Mambrini y luego el viejo Casanova lidiando con gente como el Pope Gómez, don Félix Tomassi, Santiago Maestracci, Pascuzzi, Pacífico Rodríguez y tantos especímenes de la disipación y la bohemia orinoquense. (AF)

domingo, 16 de mayo de 2021

GOBERNDOR DE BOLÍVAR ENTERRADO EN EL PANTEÓN NACIONAL

Mario Briceño Iragorri, quien fue gobernador de Bolívar, apoyó a la candidatura presidencial de Jóvito Villalba en las elecciones de 1952; pero tras el desconocimiento de la Junta Militar del resultado de dichos comicios se exilió en Costa Rica (1953) y Madrid (1953-1958). Al caer la dictadura volvió al país, pero murió al poco tiempo el 6 de junio de 1958, y es de los poquísimo civiles y hombres del siglo XX que está enterrado en el Panteón Nacional. (AF)

EL BACHI PÉREZ

Antiguamente, el Bachiller era todo un personaje, pero generalmente siempre había uno que sobresalía, como el caso del Bachi Pérez en Ciudad Bolívar, que sobresalía por la forma como se comportaba, sobre todo, enseñando la matemática que era su fuerte y a la que los estudiantes califican como una de Las Tres Marías porque la consideran árida y difícil como la Física y la Química. Pero el Bachi Pérez no era árido. Más bien chusco, irónico y muy tierno con los animales. Para prueba esta fotografía donde aparece alimentando a los pajaritos que aunque presos en una jaula, solían distraerlo de la algarada estudiantil del Liceo Peñalver, donde ej

sábado, 15 de mayo de 2021

EL SERMÓN DEL INDULTO

Con motivo de los 150 años de la muerte de monseñor Mariano de Talavera, sacerdote testigo y protagonista del proceso independentista venezolano, la historiadora y docente María Soledad Hernández publicó una investigación que representa una gran novedad en el estudio de este sacerdote: El “Sermón del Indulto”, que ni sus anteriores biógrafos habían hallado. Este sermón fue pronunciado en 1817 por el presbítero en la Catedral de Caracas frente al General Pablo Morillo, quien comandaba el ejército de ocupación del reino español en ese momento. El debate en torno al sermón se centra en si el prelado aún mantiene sus convicciones patriotas o, por el contrario, momentáneamente hace a un lado sus convicciones republicanas para salvar su vida y, por extensión, la de 67 sacerdotes ganados a la causa independentista arrestados por los realistas en La Guaira. “Mariano de Talavera es un testigo de excepción que en 81 años de vida presencia el proceso de la Independencia y participa en él”, expresó la historiadora. (AF)

viernes, 14 de mayo de 2021

MICROVIBRAFONÍA DE ESTEVES DESAPARECIÓ DEL MUSEO SOTO

En el Museo de Arte Moderno que se abrió con obras entregadas por Soto en calidad de comodato y cuyo valor entonces se estimaba en 10 millones de dólares, se hallaba también la obra musical del Maestro Antonio Estévez, quien a petición de Soto se integró al Museo con su obra Microvibrafonía Múltiple. Cada Sala funcionaba con esa música envolvente. Pero ya la música de Estévez no está, no sabemos por qué. Vibra por su ausencia. Por cierto que de Europa me escribió Sylvia Constantinidis, pianista internacional, informándome de un disco grabado por ella de canciones infantiles de Antonio Esteves. Sylvia, cuyo nombre de pila es Sylvia María Castillo Casanova, es hija de Elinora Casanova Gil Arismendi, nacida en la isla de Coche. Elinora y yo y su hermano Efraín vivíamos en Caracas en la quinta de mi Tía Regina, Este 10 Bis 144, el Conde, muy cerca del Puente Mohedano, cuando estudiábamos secundaria (AF)

martes, 11 de mayo de 2021

EL MOROCOTO DEL ORINOCO SE FUE A LA MAR

El Morocoto se tiene como un pez propio del Orinoco y actualmente se pesca en el Caroní desde que fue sembrado en el Lago de Guri, pero, por lo visto, se ha filtrado hasta el Mar tras una pasantía de adaptación en el estuario orinoquense. Pescadores margariteños de la isla de Coche dan cuenta de ello y por lo que comenten el Morocoto del Mar se captura on camarón y es más grande y con aletas pronunciada y carnosas, tanto que los pescadores prefieren las aletas o aletones como le dicen a la cabeza. Para celebrar este nuevo miembro de la fauna marina oriental, habitantes de la isla de Coche sacaron en Año Nuevo de 1946 una comparsa o Diversión con letra y música del ebanista y bandolinista Rafael González, el mismo autor de El Carite, canción folclórica emblemática de Margarita. La canción en la voz de las Guarichas comienza con Coro; El morocoto se pesca / Con carne de camarón / Para poderlo embarcar / Se la corta el aletón. / Nunca perdí la esperanza / Que llegado el mes de enero / Podía despedir las pascuas / Con todos mis compañeros / Le vendemos la cabeza / Pero no los aletones / Porque son para almorzar / Estos pobres pescadores / Yo siempre estaba en las mías / Y me sentía presuroso / Ya amores tenía con otro / Porque yo no lo sabía. (AF)

lunes, 10 de mayo de 2021

El Tirano Aguirre y el Terror del Atabapo

Tomás Funes, el terror de San Fernando de Atabapo, quiso imitar al Tirano Aguirre, a quien también apodaban “El Loco Aguirre” y él se auto-nominaba “Aguirre El Peregrino”. Funes lo imitaba en el sentido que nunca se entintaba de sangre humana las manos, sino que buscaba a quienes hicieran el trabajo por él. El Tirano tenía de Sicario al “Carolino” y a “Juan Primero” y Funes a “El Picure” y “ El Avipa”. (AF)

domingo, 9 de mayo de 2021

El irresistible temor de Pedro Montes.

Pedro Montes, quien durante su juventud se condujo como Novillero del Circo Monedero, tuvo un comercio frente al Café España y contagiado por la fiebre del automóvil, se compró uno. El problema era que temía se lo chocaran, de manera que cuando debía pasar una esquina y venía otro auto por la transversal, se salía de su carro y le hacía señal al conductor para que frenara pues él iba a pasar. Ese temor quizá era el mismo que experimentaba el monumental Negro Bogle cuando antes de pasar una esquina miraba inquieto para todos los lados y a veces aceptaba la ayuda por temor a que viniese un carro y lo aplastara. Esto lo narra Jorge Luis Borges, en Ton Castro, el impostor inverosímil. (AF)

viernes, 7 de mayo de 2021

LA CRUZ DEL SUR

Evangelia me hablaba de la Cruz del Sur que había logrado ver su padre, mi abuelo José de la Cruz Tilllero, cuando fue Marino de los siete mares. De esta constelación con cuatro estrellas dominantes en forma de cruz, habla Dante Alegieri, en la Divina Comedia, cuando pasaba del Purgatorio al Infierno y dicen que su nombre se lo puso Hernando de Magallanes navegando el Estrecho que lleva su nombre. Lo recordé anoche leyendo un cuento de Jorge Luis Borges sobre el Impostor inverosímil. Se trata del marino Ton Castro que consecuente con la tradición inglesa de “run away to sea” (huir al mar) deserta de su oficio de Marino en el puerto Valparaíso después de contemplar a la Cruz del Sur. (AF)

BOLIVARENSES VESTÍAN DE NEGRO EL 17 DE DICIEMBRE

El l7 de diciembre de ese año 1943, aniversario de la muerte del Libertador, los bolivarenses, como de costumbre y siguiendo una tradición, vestían de negro, entre ellos, una dama amiga de Mario Briceño Iragorri, a quien le escribió en tal sentido: “No haga Usted eso de vestir negros ropajes en la hora de la apoteosis de Bolívar. Eso estuvo bien que lo hicieran Doña María Antonia y sus deudos. Para nosotros, Bolívar no está en la lista de “los fieles difuntos”. Bolívar no es difunto. El está vivo y si muchos lo miran como muerto, debemos luchar tenazmente contra tal idea”. (AF)

jueves, 6 de mayo de 2021

PELOTÓN DE EJECUCIÓN

Cuando Ana Luisa Contasti, directora de la Casa del Congreso de Angostura, se veía comprometida con los asistentes a un concierto de canto y música, apelaba a un recurso que nunca le fallaba. Llamaba al Comandante de la V División de Infantería y éste tan amable y consecuente la surtía con un pelotón que un borrachito impertinente bautizó como el “pelotón de ejecución”.(AF)

martes, 4 de mayo de 2021

EL IRREVERENTE CAMILO PERFETTI

El médico ginecólogo-obstetra Camilo Perfetti era hiperestésico y tenía entre sus paisanos bolivarenses fama de irreverente, si lo sabré yo que anduve con él para arriba y para abajo. Uno de esos momentos me contó que nació el 9 de diciembre de 1935, en una casa antigua de sastrería, en la vecindad del río. Allí vivió hasta la edad de cinco años cuando inició un periplo de mudanzas de techo en techo, ya en los morichales, ya en la calle El Rosario y finalmente en la Calle Bolívar. Estudió en el Colegio La Milagrosa de los Padres Paúles hasta que finalmente se hizo hombre y universitario, pero siempre inquieto, irreverente, hiperestésico. Y así fue siempre, hasta sus 72 años y es que Camilo cuando no tenía nada que decir ni mal decir, era porque se exigía hacer las cosas de otro modo más conveniente y convencional. Por ejemplo, evitar erratas como aquella cuando era Corrector de pruebas del diario El Nacional que lo puso en manos de Pedro Estrada y todo porque dejó escapar hacia el lector un vocablo que molestaba a mi general (Pérez Jiménez) como era el de “traición” en vez de tradición. (AF).

lunes, 3 de mayo de 2021

ANECDOTAS DEL ORFANATO BOLÍVAR

El Orfanato es la Escuela o Unidad Educativa Bolívar de la Laja de San Isidro que de Orfanato, propiamente dicho, poco o nada tiene. Por fuerza de la costumbre la Escuela ha quedado connotada con el sustantivo que ciertamente la denotaba cuando fue fundada en 1937 por la Congregación de Nuestra Señora de Lourdes. Lo cierto es que esa escuela, crecida como árbol sobre las raíces del antiguo Orfanato que tanto protegió Monseñor Mejía, matricula en la actualidad más de medio millar de estudiantes que pagan 40 bolívares mensual por cursar en ese establecimiento educacional que tiene como fundamento moral el catolicismo y ostenta puesto muy alto dentro de la educación básica de Ciudad Bolívar. Por sus aulas han desfilado miembros de la crema y nata de la profesionalidad capitalina como médicos, abogados, docentes, ingenieros, novicias de votos perpetuos y hasta líderes políticos como Nelly Frederick y, por supuesto, como suele ocurrir en tiempos de la infancia escolar, muchos episodios divertidos, algunos públicos y otros reservados por la severidad conventual, pero que siempre se filtran, como la del sádico que desnudo en pelota incursionó en el establecimiento conventual para embestirle a las estudiantes internas. Afortunadamente el nudista no logró su propósito lascivo porque la Hermana Mercedes sintió sus pasos y lo descubrió camuflado tras unas palmeras al tiempo que gritaba: “Hermana, traiga el machote”. Quería decir “el machete” que guarda en el depósito el jardinero para cortar la maleza. Claro, a cualquiera se le enreda la lengua en momentos de aprieto como el de esa noche conventual perturbada por la incursión furtiva del sádico que bien vestido había dejado la ropa en el guardapolvo de la ventana violentada. Pero el Machote nunca apareció (cualquier burlón diría “y tan cerca”). La que sí apareció tan solícita como urgente, fue la patrulla de la Policía llamada con mucho temple por la Hermana Ana. La policía le dio rolo hasta más no poder y así como Dios lo trajo al mundo lo metió en chirona, sin ninguna piedad. Al siguiente día el tema del pervertido fue la comidilla en los oratorios y en el cotidiano discurrir de la escuela. No hablar más del asunto aconsejaron las docentes novicias a la vez que prometían penitencia de rodillas sobre el pavimento áspero y poroso del patio de la congregación. Penitencias como la pagada por Zaida Almeida, quien entró al aula de clases montando el burro de un labriego que había dejado amarrado en una mata de pilón de las inmediaciones: “Pero, niña, que haces con ese borrico?” “Nada malo, Maestra, el pobre que también quiere aprender”. La mata de pilón era de buen porte, de amplia fronda y tallo tan grueso y robusto que detrás de él podían resguardarse las alumnas cuando eran requeridas severamente por haber cometido alguna falta. Sólo que cuando la cola de alumnas tratando de esconderse era muy larga, quedaban visiblemente al descubierto. Las alumnas que jamás quedaron en evidencia fueron las que colocaron “saltapericos” en la silla de la cátedra de la profesora. La hermana no sabía de qué reían las niñas con tanta hilaridad, sólo cuando las asentaderas y el hábito blanco con cinta azul se posaron y los saltapericos estallaron con su característico olor a azufre que espantaba hasta el mismo lucifer. La Hermana salió en estampida y otra novicia ingresó al aula a aplacar los ánimos hilarantes con una severa admonición colectiva. Ahora no se trataba de una tremendura infantil sino de algo que que la hacía rabiar. Jamás la Hermana había perdido la serenidad corriendo horrorizada, Sólo cuando camino hacia la Iglesia de las Siervas, los sapitos desbordados de la laguna del Porvenir la asaltaron y le salpicaron el hábito con su roa-roa matinal. (AF)

sábado, 1 de mayo de 2021

LA OBRA ARQUITECTÓNICA DE UN LOCO

Cuando se construía el Hotel La Cumbre sobre el tope dl cerro La Esperanza de Ciudad Bolívar, varias señoras de la ciudad subieron el cerro para visitar a la esposa del doctor Arturo Toledo y al ver aquel enredo de madera labrada entre piedras y bases de concreto, preguntaron entonando su asombro; “Mira, Julia, qué loco es el que está haciendo esto?” A lo que respondió la esposa de Toledo: “Un loco que anda por ahí”, pero el arquitecto Fruto Vivas que trabajaba muy cerca sin ser visto, se hizo sentir con su característica sensibilidad de artista: “Loco yo no, señora, loco su marido que hace lo que yo le digo que haga”. Y la locura que en estos casos es un estado de sueño virtualmente imposible, se hizo realidad y repercutió hasta en los estratos más apartados, pues el nombre lo objetivó una niña del Barrio La Sabanita que entre miles ganó el ofrecido premio del concurso popular lanzado a los cuatro vientos. (AF)